Logros y experiencias del 2017


Historia/Foto: Kathe Kohler, Bolivia

Hemos concluido un año de aprendizaje y experiencias nuevas para nuestro equipo de trabajo conformado por 8 “Profes” y una Coordinadora de proyecto. Llegamos a siete comunidades del​ ​municipio de San Andrés.

Todos, a excepción de Dayana ,somos nuevos en la Fundación. Ella y Yaskarita​ ​hicieron un buen trabajo, que gracias a su dedicación y esfuerzo logramos que la comunidad obtenga la​ ​resolución de nueva creación de la Unidad Educativa Las Palmeras emitida​ ​por el Ministerio de​ ​Educación de Bolivia. Padres de familia y dirigentes comunales fueron piezas claves para que lograr​ ​nuestro objetivo.

¡Lo logramos!​
Guillermo trabajó en la comunidad de San Martin de Porres, dictaba clases de computación a alumnos​ ​que por primera vez estaban al frente de una computadora. En un par​ ​de meses aprendieron a manejar​ ​los programas básicos de ofimática. Tengo presente que en el examen de fin de año me percaté que​ ​habían muchas sonrisas de​ ​los papá. Se notaba que ellos estaban orgullosos de ver a sus hijos que​ ​resolvían sin problemas la consigna que les daba el maestro.

¡Muy bien!​
El “Profe” Jorge y los estudiantes de Nuevo Amanecer en la evaluación final nos presentaron cuatro​ ​Perfiles de proyectos productivos. Para los alumnos del programa fue una linda​ ​experiencia ya que​ ​habían adquirido nuevos conocimientos y los padres de familia estaban felices de ver a sus hijos exponer​ ​su trabajo. Esa tarde escuché decir, “Nuestros hijos aprendieron a hacer un proyecto. El siguiente paso es​ ​presentarlos a las instituciones públicas para traer apoyo a la comunidad y se beneficien​ ​nuestras​ ​familias. ¡Buena idea!​ ​Hernán, Psicopedagogo de profesión, trabajó en la comunidad de Manguita. Estaba a cargo de la clase​ ​multigrado nivel primario. Les enseñó computación y niveló a los estudiantes en las asignaturas de​ ​lenguaje y matemáticas. El avance que vimos en los alumnos fue significativo: aprendieron a leer,​ ​contar, sumar, restar, multiplicar y dividir; esuelven problemas matemáticos y manejan perfectamente​ ​los programas de PowerPoint, Word, y Paint.​ ​La maestra Vanesa encargada del proyecto en Cotoca, dictaba clases a los niveles de primaria y​ ​secundaria. Nuestros estudiantes son aplicados y esperan impacientemente las clases de “computación”.

Una anécdota para contar que en la evaluación de medio término teníamos alumnos que no salían al​ ​frente por vergüenza. No sucedió lo mismo al final del año. Estaban más desenvueltos y pasaron a​ ​exponer sus trabajos sin problemas y lo hicieron ¡Muy bien!​ ​El proyecto de Villa Alba estaba a cargo de Baldemar. El logró que Erick de 10 años aprendiera el​ ​abecedario, las vocales y contar hasta el número 50. En algún momento​ ​hablamos con el maestro y​ ​ambos teníamos un sentimiento de frustración porque los meses pasaban y no había avance académico​ ​en el niño. Se buscaron diferentes estrategias que con el apoyo de Ian el maestro pudo implementarlas​ ​en el aula y al final de la gestión tuvimos un buen resultado.​
Rider, maestro de la comunidad de Monte Cristo, el año pasado enseñó metodología para la elaboración​ ​de Perfiles de proyectos socio productivos. Era emocionante ver que los padres​ ​de familia que estaban​ ​involucrados en los trabajos de sus hijos, incluso tuvieron la idea de construir pequeños corrales para​ ​sus exposición de sus trabajos. ¡Muchas gracias Papás!
“Profes”, quería dedicarles este artículo y de esta manera resaltar el trabajo silencioso que hace cada​ ​uno de ustedes, valoramos todo su esfuerzo y dedicación en​ ​los proyectos Alma.